Desde Obras Sanitarias reconocieron que, si el río baja a menos de 20 centímetros, habrá inconvenientes en la toma de agua para la planta de avenida Ramírez. Las obras que se proyectan para garantizar el servicio.
«El río está en 25 centímetros, lo que nos da un alivio porque el fin
de semana marcó 19 y 20 centímetros. Con la altura actual del curso de agua, no habría inconvenientes porque la
bomba funciona bien, y la provisión de agua es normal», comunicó a Elonce TV el
responsable de Obras Sanitarias, Ing. Juan Pablo Arroyo.
«Este fin de semana hizo mucho calor y los vecinos
usaron mucha más agua que lo habitual. Las reservas de agua bajaron dentro de los parámetros normales, lo común para las
altas temperaturas que se registraron», explicó Arroyo al destacar que
«no hubo inconvenientes» con la provisión de agua en la capital
entrerriana.
Consultado al ingeniero qué pasaría si el río continúa en
bajante, éste explicó: «La planta de avenida Ramírez se alimenta del
muelle 1, donde está la bomba que traslada el agua cruda hasta la
potabilizadora. En caso que el río siga bajando a menos de los 20 centímetros, podría afectar
esa toma, que es solo una parte de lo que transporta desde el río hasta la
planta, porque la otra parte -más del ¾ del volumen de agua- llega
potabilizada desde la planta Echeverría».
Fuentes municipales comunicaron a Elonce TV que, en caso
de registrarse inconvenientes en la captación de agua para la planta de
Ramírez, «durante la noche y madrugada, planta Echeverría le suministra
agua para que llenen reservas».
«Si
la bomba quedara a llegar fuera de servicio, se haría un procedimiento para
generar una especie de dique a la altura de la bomba, para -con unas pequeñas
bombas- captar agua desde el río hacia el dique y tomarla con la bomba
extractora», adelantó Arroyo.
«El Paraná llegó a 19 centímetros del domingo, pero aun
no necesitamos generar esa obra, que lleva entre siete y diez días. Estamos pendientes de la
altura del río porque no tiene sentido hacerla, si después repuntaría», aclaró al
comentar que «se calcula que, en los próximos días, subiría entre 12 y 15
centímetros más».
En la oportunidad, comunicó que otra de las alternativas,
«para independizarnos de la altura del río, sería trasladar la bomba que
está en el mulle 1 hacia el mulle 2 -que tiene una profundidad de 15 metros y
no registra inconvenientes con la provisión de agua».
Respecto del pedido del intendente Bahl a Nación para para
que la represa Itaipú libere caudal de agua, el ingeniero refirió que «no
es que se resuelve el problema con la apertura de las compuertas, pero se gestiona que las reservas
de las represas se mantengan un poco más bajas y nos permitan tener un poco de
agua».
«Tanto en Brasil como en el norte argentino se registran
problemas hídricos porque hace varios meses que no llueve y eso genera ciertos
inconvenientes», acotó al respecto.
Punto aparte, Arroyo mencionó que el gobernador Bordet y el
presidente Fernández firmaron el proyecto para una duplicación de la planta
Echeverría y que provea agua a Paraná, Colonia Avellaneda, San
Benito, Oro Verde y Sauce Montrull.
«Paraná hoy no está en condiciones de proveer agua a
localidades aledañas, porque la planta Echeverría funciona al 100% de su
capacidad y solo alimenta a la ciudad. Pero cuando esté terminado el acueducto metropolitano Gran Paraná, sí tendrá un
excedente de agua que podrá comercializar», indicó.
El responsable de Obras Sanitarias indicó que durante todo el
año se contemplaron pequeñas obras para tratar de normalizar las presiones en las diferentes
zonas de Paraná. En ese sentido, detalló que, hace más de un mes, en el
kilómetro 5½ se instaló una estación de arreo de bombeo que toma el agua que
llega a la zona sur y la impulsa con más presión. También se realizan enlaces
en otras zonas para nivelar las presiones a través de maniobras con válvulas.
En la ocasión, Arroyo anunció que en 40 días finalizaría la
perforación de los 14 pozos semisurgentes (se recuperaron cuatro que ya existían y diez nuevos),
«lo que favorecería a la zona sur de la ciudad, con mayores dificultades
en la provisión de agua».
Medidores
«Gestionamos ante Nación la instalación de micro
medidores en algunas partes de la ciudad; la propuesta prevé conseguir el
financiamiento para iniciar la obra que demandaría hasta dos años»,
comentó el funcionario municipal.
Derroches
«Hay una ordenanza que establece días y horarios en los
que se puede, por ejemplo, lavar las veredas; y la municipalidad, a través de
Obras Sanitarias, puede multar al que no respeta la ordenanza o que derrocha
más agua de lo que debería», recordó Arroyo al reconocer que debido a la
«escases de personal cuesta llegar a todos lados» para controlar este
tipo de infracciones.
«Algunos vecinos lavan la vereda todos los días de la
semana, a éstos, primero se les advierte y después se les aplica una
multa», indicó.
Piletas
«Recomendamos que mantengan las piletas el mayor tiempo
posible, sobre todo las de lona porque son las que más agua consumen»,
encomendó.
«No está permitido tener una bomba que chupe de la red
para llenar un tanque; si se puede tener un tanque cisterna», puntualizó
Arroyo al revelar que en Paraná se consumen «625 litros por habitante,
siendo que la OMS establece que tiene que ser de entre 200 y 250 litros».
«La población consume el doble de lo que debería
consumirse, según la OMS. Y además del exceso en consumo, hay pérdidas de hasta
un 20% en la red», reconoció.
FUENTE: Elonce.com