Un estudio privado señala que a fines de marzo se computaron 120 mil aportantes menos que a fines de diciembre al sistema previsional. El desempleo anticipa un crudo invierno.
Se perdieron 120.000 puestos de trabajo netos entre diciembre y marzo de 2023, con lo cual el sector formal de la economía “empieza a sentir los primeros fríos”. El análisis de los últimos datos de empleo oficiales arrojó algunas advertencias: en la medida que las ventas no se recuperen y la demanda continúe deprimida, es probable que los problemas empeoren. De momento, la caída fue más pronunciada entre los empleados del sector público, seguidos por los privados, mientras que el cuentapropismo aumentó. En los privados, la caída fue sustancial en el caso de la construcción.
El informe de la consultora Ecolatina, en base a los datos del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), afirma que en materia de empleo “es probable que el clima otoñal se vuelva más frío”. Se van un poquito atrás temporalmente para señalar que desde el último pico de actividad, en agosto pasado, se perdieron casi 83.000 puestos de trabajo formales netos, pero si se acota el período a lo que va del año, la caída se hace algo más profunda, implicando una destrucción de más de 120.000 puestos de trabajo netos.
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