Luego de un repunte durante el segundo trimestre del año, nuevamente preocupa la tendencia a descender que está atravesando el río Paraná, sin lograr recuperarse de la bajante histórica que enfrentó en 2020.
Juan Borús, Subgerente de Sistemas de Información y Alerta Hidrológico del INA, quien detalló que “la actual bajante es el resultado de la faltante de lluvia que se registra en dos o tres semanas sobre la mitad norte de la Cuenta del Plata.
Todavía la bajante no se manifestó totalmente, creo que tenemos que acostumbrarnos a ver un descenso que podría llegar a estabilizarse en la tercera semana de agosto.
Igualmente estamos bastante mejor, con 1.30 metros por encima de lo que se registró el 20 de julio del año pasado, pero todavía 2 metros más abajo del valor medio del nivel que deberíamos tener a esta altura del año”.
“Tenemos por delante varios meses con la posibilidad de continuar con aguas bajas en el tramo de Paraná inferior y no sabemos si a fines de enero o febrero del año que viene podremos llegar a hablar de una situación medianamente normal.
Por ahora no tengo la posibilidad de imaginarme cómo sería en noviembre o diciembre, porque la variedad climática nos ha sorprendido muchas veces. En principio, lo más probable es que hasta el verano no tendremos novedades al respecto”, confirmó el experto.
