Las fiestas electrónicas en Sauce Montrull, la pequeña población distante a unos 15 kilómetros de Paraná, pasaron a ser casi una costumbre en los últimos años. El reciente anuncio fue una fiesta que tendría lugar en una quinta, pero este miércoles se confirmó que no está autorizada.
Autoridades de la policía encargada de la zona que abarca Colonia Avellaneda y Sauce Montrull mantuvieron el pasado martes una reunión con el presidente de la junta de gobierno, Carlos Salas, para trabajar en conjunto acerca del control y las determinaciones tomadas sobre fiestas que están programadas para el fin de semana largo.
En diálogo con EL DIARIO, Salas indicó ayer que “tuvimos una reunión con la policía en donde hablamos sobre las fiestas que estaban previstas para el fin de semana”, e hizo referencia acerca de una fiesta específicamente que sería la más convocante el lunes 18, en esa localidad en cercanías a la ruta 12.
“La documentación que presentaron los organizadores para realizar el evento estaba en regla, nosotros desde Junta de Gobierno lo mandamos al Ministerio de Gobierno y desde allí nos envían una resolución diciendo con todos los detalles y con la determinación de no habilitar el evento”, sostuvo el presidente de la junta de gobierno.
SIN TRANQUILIDAD
Soledad, una vecina de Sauce Montrull, habló con EL DIARIO y explicó que “cuando alguien elige vivir en Sauce Montrull es porque quiere vivir en un lugar tranquilo, entonces nos encontramos con que empezaron a existir reiteradas fiestas electrónicas para lo que había un vacío legal”.
En ese sentido y en un reiterado pedido a la ministra de Gobierno, Rosario Romero, se redactó una ordenanza que regula este tipo de fiestas en lugares privados.
Para la Junta de Gobierno no es un trabajo sencillo controlar todo este tipo de eventos ya que se debe contar con elementos de alta tecnología para monitorear los decibeles, además de los horarios y los trámites legales.
“¿Por qué se elige Sauce Montrull para hacer todas las fiestas y no en Paraná?”, se preguntó la vecina. “Nosotros como vecinos queremos evitar que se sigan haciendo fiestas electrónicas, porque cuando acordemos vamos a tener cada tres semanas una fiesta diferente”, y ratificó: “Los vecinos vamos a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para que no se sigan haciendo fiestas electrónicas”.
ANTECEDENTES
Cabe recordar que los vecinos de la zona se venían quejando en reiteradas oportunidades por dos o tres fiestas electrónicas que cada vez iban siendo más importantes rompiendo con la resolución Ministerial Nº 146 en donde se estipuló que como máximo este tipo de eventos deben durar 6 horas y en las últimas oportunidades llegó a superar las 10 horas, además de incumplir con los decibeles máximos en el nivel de la música durante todo el día.
Por último, cabe señalar que la realización de dichos eventos persigue un fin netamente comercial, ya que cada fiesta moviliza gran cantidad de dinero, aprovechando el fin de semana largo y la Fiesta de Disfraces, al tiempo que altera la tranquilidad de los vecinos.
FUENTE: El Diario
