Pese al inicio de la cursada, estudiantes de la FTS en Gualeguaychú se declararon en alerta

Estudiantes de la Facultad de Trabajo Social en Gualeguaychú publicaron un comunicado para expresar preocupación por sus condiciones de cursado.

Estudiantes autoconvocados de Gualeguaychú, que cursan las propuestas de la Facultad de Trabajo Social, anunciaron que se encuentran en estado de alerta por las condiciones del dictado de las clases a pesar de la firma del convenio entre el municipio y la casa de estudios.

«Debido a las noticias triunfalistas que han circulado en los medios locales y cuentas oficiales, tanto del gobierno municipal como de la FTS, creemos necesario informar algunas cuestiones en torno al inicio de la cursada y sus prolegómenos», indicaron.

En este marco, expresaron que «la comunicación oficial por parte de la Facultad en referencia a las condiciones de cursada ha sido, por momentos, confusa y contradictoria» y advirtieron que, en medio de un contexto de «imprevisibilidad e incertidumbre», «algunos compañeros oriundos de localidades vecinas no pudieron planificar su viaje y/o mudanza a la ciudad de Gualeguaychú para estar presentes el primer día de cursada».

Asimismo, la asamblea estudiantil se refirió al espacio que se utiliza para el dictado de las clases: «Debido a la torpe acústica del lugar y la disposición de varias columnas que atraviesan el espacio, sumado a la colocación de sillas sin pupitre, la experiencia de cursado se ve afectada considerablemente» y calificaron esta situación como «un deterioro en las condiciones materiales de cursado ya que el año anterior, a través de insistentes reclamos, se nos habían concedido una cantidad significativa de pupitres individuales suficientes para todos y que el viernes 5 de abril no estaban».

Finalmente, los estudiantes advirtieron que se vio reducida la modalidad del cursado presencial y pasaron de tener clases 50% presencial y 50% en años anterior «a un régimen 75% virtual y 25% presencial». Por estos motivos, la asamblea consideró a las circunstancias «lamentables y evitables», por lo que se decidió mantenerse en estado de alerta.



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