Además de Rosario, las 30 requisas fueron en Villa Gobernador Gálvez e islas entrerrianas del río Paraná donde ocultaban las armas y la droga.
La Prefectura Naval Argentina allanó este sábado de madrugada más de 30 domicilios en la ciudad de Rosario y Villa Gobernador Gálvez y fincas ubicadas en islas entrerrianas del río Paraná, en el marco de una investigación por narcotráfico. En la investigación colaboró personal de Prefectura de Entre Ríos y otras provincias.
Las medidas fueron ordenadas por el Juzgado Federal N° 3, a cargo del Dr. Carlos Vera Barros, Secretaría del Dr. Hernán Flores y el direccionamiento de la investigación fue llevado adelante por la Fiscalía Federal N° 2 de Rosario, a cargo del Dr. Claudio Kishimoto, Secretaria Dr. Franco Benetti.
Los registros fueron altamente positivos en materia del secuestro de cocaína, marihuana, vehículos, armas, municiones, teléfonos celulares, tablet, PC, CPU, pendrive, elementos de cortes, dinero en efectivo , documentos, instrumento de precisión, peso ,corte y fraccionamiento, motores fuera de Borda y demás elementos de interés para la causa.
Además, resultaron detenidos siete hombres y una mujer, los que integraban una organización criminal bien definida con roles para cada uno de sus integrantes, en la comercialización de estupefacientes, con vínculos estrechos con el “clan Cantero”.
Investigación
Acorde las tareas encomendadas por la Fiscalía interviniente, la causa tiene su origen en un hecho de balaceras suscitado en la ciudad de Rosario y en exhaustivas tareas de campo llevadas adelante por los investigadores, quienes pudieron establecer que la organización criminal se dedicaba a la comercialización de estupefacientes y determinar que, en un lugar ubicado en la zona de islas, se mantenían ocultan y “se enfriaban las armas” y las sustancias, que luego utilizaba parte de la banda de “Los Monos”.
La cocaína y la marihuana se trasladaban desde el continente hacia la isla y, luego de unos días, era nuevamente puesta en la calle a través de personas que interactuaban y las distribuían a diferentes puntos de venta de estupefacientes, para posteriormente, uno de los miembros de la organización, encargarse de recaudar las ganancias producidas.
El megaoperativo incluyó el despliegue de unos 330 efectivos de la Prefectura, y 70 móviles terrestres y fluviales (que reforzaron los desplegados en Rosario) y que se desplazaron desde las provincias de Buenos Aires, Entre Ríos, Ciudad de Buenos Aires y de otras localidades de la provincia de Santa Fe.
La eficacia de las investigaciones, sirvió para desbaratar distintos niveles de la Organización, por lo que se logró identificar a distribuidores y acopiadores; eslabones fundamentales en la cadena criminal.
