Más de 20 mil personas presenciaron el Carnaval del País en el Corsódromo de Gualeguaychú

En una jornada donde nuevamente se alejó la siempre amenazante lluvia, pero con predominio de una temperatura fresca, el Corsódromo “José Luis Gestro” de Gualeguaychú vivió su mejor noche: la sexta del Carnaval del País. De acuerdo a los organizadores, más de 20 mil personas presenciaron el espectáculo, superando por poco a la noche inaugural del 8 de enero.

Especial de análisis desde Gualeguayhú

Por otro lado, la Comisión del Carnaval introdujo cambios para los preparativos de las carrozas, previo al desfile de cada comparsa. Ahora las carrosas ya no se pueden armar con personas dentro del espacio denominado “la previa”, es decir, antes del ingreso al Corsódromo. Además, se establecieron mecanismos de penalidades para las que no cumplan en tiempo y forma.

La decisión está concatenada al incidente que se vivió en la quinta noche (sábado 5 de febrero) cuando dos personas que estaban en el canasto de una grúa, cayeron de una altura aproximada a los cuatro metros. Como consecuencia de este infortunado hecho, uno de ellos sigue grave de salud a raíz de las lesiones recibidas.

A esta situación, la familia del carnaval de Gualeguaychú vivió una semana conmovida, porque se conoció el fallecimiento de Jesús Castro (de la comparsa O’Bahía) y de Beto Escalada (de la comparsa Marí Marí).

Por eso a nadie le extrañó y todos acompañaron cuando desde las distintas comparsas se rindieron cálidos como merecidos homenajes. Porque si algo tiene el Carnaval del País es que sabe que el amor y la lealtad como el compromiso y la responsabilidad derrotan al olvido y superan las adversidades más inesperadas.

Competencia y lo que viene

Es oportuno contextualizar que, si bien la edición 2022 es puntuable, la Comisión del Carnaval, ya decidió que el año que viene tendrán asegurado su lugar (no importan qué puntajes obtengan este año) las comparsas Ará Yeví, Marí Marí y Kamarr. Esto es así, porque son el orden que hubiera correspondido en la edición 2021 que fue suspendida por la pandemia del coronavirus.

Ahora bien: si la Comisión del Carnaval decide que en 2023 saldrán cuatro comparsas (en vez de tres como es tradición), la disputa real entonces es entre Papelitos y O´Bahía. Y esa es la verdadera competencia, porque las demás ya tienen asegurado su lugar para la próxima edición.

Y lo que se viene en lo inmediato son dos instancias clave: la primera es que la Comisión organizadora deberá confirmar la fecha de la elección de la Reina del Carnaval; y la segunda es que el feriado del Carnaval (sábado 26, domingo 27 y lunes 28 de febrero) ya se está viviendo a pleno por el éxito de las ventas de las entradas anticipadas.

Ará Yeví: la que pisa fuerte con alma carnavalera

A las 21:53 la voz del Corsódromo, Silvio Solari, despertó a los espectadores al anunciar el comienzo del Carnaval del País.

La primera en desfilar fue la comparsa del Club Tiro Federal, Ará Yeví, que es una expresión del idioma guaraní y significa: “Tiempo de diversión”.

Haciendo honor a su nombre, Ará Yeví, propone para esta edición el tema “Turba” y está dirigida por Leo Rosviar.

“Turba” no refiere a la sustancia orgánica que puede utilizarse para fortalecer a las plantas, sino que es más sociológico porque remite a la idea de un grupo de personas que suelen marchar de manera desorganizada, pero eso no implica que se carezca de objetivos.

“De la ribera llega la turba con su bandera: negra y dorada. Viene bailando descontrolada”, reza su canción insignia para dar cuenta que es posible derrotar al que oprime y del mismo modo es posible superar la ruindad que implica toda injusticia por la celebración de la alegría. La “Turba” descontrolada es una oportunidad para vivir el carnaval.

Una mención especial merece la banda musical “Alma Carnavalera” liderada por Gustavo “Titi” Pauletti y Belén Grecco. Se trata de una pareja histórica del Carnaval del País, que además de una aquilatada experiencia y una energía propia de la juventud, manejan los tiempos del espectáculo sin especulaciones y con una capacidad de entrega impar.

El carnaval como espectáculo no es solamente un mundo que remite a lo visual, ya sea por sus vestuarios, sus carrozas e incluso su coreografía. Claro que el arte visual es clave, pero el carnaval es algo más y también es su música. Es el ritmo mismo de un sentimiento que se manifiesta con el color, con el movimiento, pero que necesita imperiosamente alimentarse con la música.

Y en este aspecto, Titi Pauletti y Belén Grecco logran contagiar al público del mejor espíritu del carnaval, más allá del club de pertenencia. No es poco en un espectáculo como el carnaval donde si bien existe la competencia, no se trata solamente de demostrar talento, sino esencialmente capacidad para que ese talento sea parte del conjunto.

Si bien cada integrante de una comparsa tiene su momento para lucirse, incluso hasta de manera individual; con los músicos eso no ocurre en la misma medida; aunque ellos aportan la escenografía sonora para que todos se luzcan.

O´Bahía sigue buscando su inspiración

La segunda comparsa en desfilar fue O´Bahía del Club Pescadores, con su propuesta “Colombina”. Cuando el reloj marcó las 22:42, esta comparsa apareció en el Corsódromo. Al igual que en la quinta noche, nuevamente sigue buscando abrazarse mejor a la inspiración que propone con su tema “Colombina”.

La comparsa dirigida por el experimentado y talentoso Adrián Butteri, propone la conexión con una musa ideal, especialmente entre los desposeídos y los olvidados. Pero, su desfile por los 500 metros de la pasarela tiene muchos baches; a pesar que anoche fue una de sus mejores actuaciones.

A los doce minutos de su desfile fue notorio un desperfecto en el sonido de los músicos, aunque diez minutos después hubo revancha: justo al pasar frente al puesto del jurado, la actuación de los músicos generó un contagio por igual en todas las tribunas, sin excepción. Aunque no se pudo sostener esa intensidad en la continuidad de la pasarela.

Para destacar su batucada y su pasista Camila Carro, que se diferencian del resto por su actuación muy bien sincronizada, que armoniza con mucho equilibro con el mejor espíritu del carnaval.

Quedan cuatro noches, donde seguramente O´Bahía encontrará su inspiración “Colombina” porque le sobran talentos y virtudes.

Papelitos: “El grito sagrado”

La comparsa Papelitos del Club Juventud Unida, que celebra 45 años de vida, fue la tercera en el orden del desfile.

Esta comparsa le debe su nombre a la “Murguita Infantil”, que en 1977 confeccionaba sus trajes con papel. Así nació esta identidad que ilumina como pocas instituciones a los barrios de la zona Oeste de la ciudad.

Este año propone un tema basado en la estética africana: “Pawé”. La historia narra que, en una comunidad, una mujer será madre y ella lo comparte con sus vecinos. Entre todos hacen el ritual ancestral para dar la bienvenida a esa nueva vida.

Ellos creen que todo ser tiene una canción propia, es decir, su “Pawé”, que a su vez lo traducen como “tu papel”.

Bajo la dirección de Juane Villagra, Papelitos exhibe –junto a Ará Yeví- las mejores carrozas del Carnaval 2022.

Además, las dos carrozas principales son coherentes en su eje narrativo, aportando a su vez una estética plástica muy bien lograda en la expresión de sus rostros y en el movimiento mismo de la estructura.

También la batucada “Los Pibes de Juventud”, bajo la dirección de Esteban Martín Piaggio, viene creciendo noche a noche y la de ayer fue una de las mejores que se ha visto en este carnaval teniendo en cuenta las seis fechas ya consumidas.

Lo otro que se debe destacar es su despliegue prolijo a lo largo de la pasarela, de modo que todo el público puede apreciar la misma calidad artística. Un aspecto no siempre valorado y, sin embargo, muy apreciado más allá de las ubicaciones del público.

Marí Marí: pasión infinita

La cuarta comparsa en desfilar fue Marí Marí del Club Central Entrerriano con su tema de reivindicación de género y de cambio social: “Cosa de Mujeres”.

Su aparición en el Corsódromo fue muy esperada por los acontecimientos de la semana pasada. Por eso cuando a las 00:20 se anunció su presencia, el público –como suele hacerlo cada vez que aparece La Aplanadora- comenzó a vibrar en todas las tribunas.

La “Roja y Negra” genera un vínculo de encantamiento, encanta, es decir, comunica con magia. Se trata de un romance que se extiende de generación en generación, pero también con espectadores sean locales o visitantes. Marí Marí –que es una expresión Mapuche que referencia a un saludo como “los buenos días o las buenas noches”- tiene ese poder de convocatoria que la hace diferente.

Bajo la dirección de Sebastián Benedetti, “Cosa de Mujeres” es una propuesta muy actual porque si una sociedad quiere mejorar sólo lo hará a través del reconocimiento de sus integrantes; es un tema oportuno porque hoy más que nunca se requiere de un cambio cultural en materia de género; es también pertinente, por lo adecuado de su tratamiento y muy acertado para traducirlo en el lenguaje del arte del carnaval.

La historia refleja que las mujeres poseen una fuerza ancestral, que además de generar vida, pueden superar aquello que la oprimen. A modo de ejemplo, destacan como en medallones del alma a personalidades como Mercedes Sosa, Frida Kahlo, Evita, Micaela García, la Madre Teresa de Calcuta, Maria Salomea Sklodowska-Curie (Madame Curie); María Remedios del Valle (la capitana afro del ejercito independentista); María Elena Walsh; Elvira Rawson (una dirigente radical y fue también la segunda médica del país); y Diana Sacayán (víctima de un crimen de odio).

Por otro lado, su reina Silvana “Bombón” Fernandes es un espectáculo dentro del propio carnaval. Logra con su virtuosismo un despliegue, que permite apreciar su belleza, pero especialmente la belleza de su danza.

A la sólida propuesta de Marí Marí se le debe sumar –como ya se apuntó- la intensidad de su banda musical “Toque de Samba” liderada por Martín Irigoyen. Si se destacó la musicalidad de Ará Yeví; la de Marí Marí tiene también una sonoridad contagiosa que invita al público a vivir el espíritu del carnaval: se puede decir que es un diálogo, un entendimiento a partir de los sentidos.

A “La Aplanadora” le alcanzaron 40 minutos –finalizó a la 1:00- para demostrar por qué el público tiene fidelidad.

Kamarr: como salida de un cuento “De las mil y una noche”

Cuando el reloj marcó que ya habían pasado siete minutos del domingo 13 de febrero, Kamarr –que en árabe significa “Luna”- hizo su aparición para clausurar la noche.

La comparsa del Centro Cultural Sirio Libanés, presenta su tema “Sembrador de Ilusiones”, articulado a partir de una nítida estética del Medio Oriente.

La comparsa -dirigida por Rodolfo Rodríguez-, cuenta la historia de un mercader que es hechizado y gracias a ese encantamiento comienza a sembrar –para dicha del pueblo- ilusiones, incluso más allá de sus propias fronteras.

“La Azul y Negro” desfiló mucho más prolija que las veces anteriores. Y a pesar que era la quinta y última comparsa; que la noche se asociaba más al frío, logró sacudir a un público que a través del baile y de las canciones se quedó hasta el final, mostrando un entusiasmo similar que al principio.

Ya habían pasado casi cuatro horas de espectáculo. El reloj marcaba que faltaban siete minutos para las 2 de la mañana de este domingo 13 de febrero.

La batucada “Las Audaces”, que está integrada solo por mujeres, aportó el calor necesario para disipar al frío y obtener –casi por ovación- el reconocimiento del público.



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