Las acusadas habrían logrado manipular a la víctima de tal forma que se habla de un perjuicio económico inicial estimado en más de 50.000.000 de pesos.
La capital entrerriana fue escenario de una historia digna de un guion de ficción, pero lamentablemente real, que culminó con la detención de dos mujeres, una empleada provincial y otra municipal, acusadas de orquestar una gigantesca estafa y extorsión contra un empresario local. Las acusadas habrían logrado manipular a la víctima de tal forma que se habla de un perjuicio económico inicial estimado en más de 50.000.000 de pesos.
La investigación, llevada a cabo por la División Investigaciones de la Departamental Paraná, logró “desenmarañar” esta compleja trama. El caso se inició hace pocos días, cuando el propio empresario se presentó en la División Drogas Peligrosas para denunciar que estaba siendo víctima de amenazas y extorsiones por parte de dos mujeres. La causa fue rápidamente transferida a Investigaciones, que emprendió un “minucioso trabajo de recolección de datos”.
Según contaron a AHORA fuentes ligadas a la investigación, el vínculo entre las mujeres y la víctima se remonta a “algunos años”, cuando el empresario las había contratado para el cuidado de su madre. A partir de esa relación, habrían comenzado un proceso de manipulación extrema. La estratagema llegó a tal punto que lograron hacerle creer que lo estaban siguiendo para matarlo, incluso se menciona la posibilidad de un “montaje escénico” para reforzar esta creencia.
La manipulación se complementaba con el envío de fotos, llamadas extrañas y, fundamentalmente, con el pedido de dinero, cuya cantidad “cada vez fue siendo más importante”.
La situación habría empeorado cuando falleció la mujer que estaba al cuidado de las hoy acusadas. Más seguimientos, amenazas y llamados extraños detallando movimientos de la familia.
Con la información recabada, el fiscal Martín Wasinger solicitó una orden de allanamiento al juez de Garantías, Elvio Garzón, quien autorizó los procedimientos. En la noche del jueves, la policía irrumpió en viviendas del barrio Belgrano, específicamente en Cortada 919. Los operativos resultaron “exitosos para la investigación”.
Durante los allanamientos, se logró un importante secuestro de bienes que podrían estar relacionados con las actividades ilícitas. Entre lo incautado se destacan:
Dispositivos tecnológicos: teléfonos celulares, pendrives, tarjetas de memoria, relojes digitales, notebooks y cámaras digitales.
Vehículos: cuatro vehículos en total, incluyendo un vehículo Ford Ka, una motocicleta Yamaha XTZ125, una motocicleta Honda CG y un vehículo Renault Duster Oroch.
Efectivo: se incautó un total de $477.680 en efectivo.
Otros objetos: diversos artefactos del hogar, herramientas de alta gama y elementos relacionados con actividades de pesca y camping.
Una característica notable de estos objetos, según los investigadores, es que presentaban un “estado prácticamente nuevo”, lo que refuerza la hipótesis de que habrían sido adquiridos “a través de actividades extorsivas a lo largo de varios años”.
Las dos mujeres involucradas fueron identificadas y quedaron “supeditadas a la causa”. Todos los elementos secuestrados fueron enviados a peritar como parte del proceso investigativo en curso.
