El hombre detenido dice que le dejaron la droga para que la guarde a cambio de dinero. Además tenía un invernadero de cannabis en Paraná.
Un intento de robo y amenaza de muerte ocurrida en agosto fue el hecho que abrió una investigación que derivó en el secuestro de casi un kilo de cocaína de máxima pureza en el barrio La Milagrosa de Paraná.
El estupefaciente estaba guardado en la casa de un joven de apellido Ríos, hermano del joven asesinado el 25 de octubre de 2015 día de las elecciones generales en el barrio Paraná XX e hijo del un exfuncionario de la Policía de Entre Ríos condenado por tráfico de estupefacientes.
El hombre de 33 años quedó a disposición del fiscal Laureano Dato, ya que en su casa tenía cocaína, un invernadero de cannabis sativa y armas.
Todos los elementos fueron secuestrados por el personal de la División Robos y Hurtos de la Policía de Entre Ríos, que tras una minuciosa investigación llegó a la casa del joven en calle Los Tilos. En una primera declaración el detenido anunció que la droga no era suya, sino que alguien se la había dejado para cuidado. Suele ocurrir en Paraná, que narcos utilizan a personas para que le cuiden la droga. La paga es con plata o con estupefaciente en caso que la persona sea adicta. La droga es dejada en cajas fuertes con candados o cajas tipo de herramientas también con cerraduras. De ese modo en caso de caer en un allanamiento, los narcos no pierden todo el estupefaciente.
Según supo UNO, la droga encontrada en la casa de Ríos habría sido fraccionada en ese lugar y llevada a otro lado para la venta. En el interior de la caja fuerte había bolsas con piedras de cocaína y en otro sector de la casa material para estirarla.
En otro sector de la casa la Policía halló dos revólveres calibre 32 largo; 24 cartuchos calibre 9; 31 calibre 32 largo; siete balas calibre 32 corto; seis calibre 22 corto; cuatro calibre 22 largo y uno calibre 45. Los investigadores quieren a saber ahora si en esta casa no se alquilaban municiones y armas lo podría llegar a complicar más la situación procesal del imputado. Por orden de la Fiscalía además de las armas, marihuana y cocaína se incautó todo el sistema de iluminación para las plantas de cannabis sativa que tenía el joven como así también fertilizantes y una balanza digital.
VENDÍAN DROGA
Gendarmería, luego de efectuar tareas de investigación y con conocimiento de la Fiscalía de Concordia y el Juzgado de Garantías, pudieron establecer que un domicilio ubicado en esa ciudad, funcionaba como punto de comercialización de drogas en la modalidad “narcomenudeo”.
Al ingresar al inmueble, los gendarmes hallaron 380 gramos de marihuana, 1,8 gramos de cocaína (fraccionados listos para la venta), plantas de “cannabis sativa”, 16.010 pesos argentinos y un teléfono celular. Asimismo, como resultado del registro personal de la Fuerza detuvo a tres personas.
El magistrado interviniente ordenó el decomiso de la droga y los elementos hallados como así también la detención de los tres involucrados que en las próximas horas serán indagados y se dispondrá si quedan presos.
FUENTE: Diario Uno
