En Francia, aumenta la incidencia por COVID-19 y la ocupación en los hospitales. En la región parisina, donde vive casi el 20 % de la población francesa, ya han comenzado a trasladar a enfermos en cuidados intensivos a otras regiones con hospitales menos saturados.
En París y su cinturón ya se baraja un confinamiento. En el aeropuerto de Orly, el portavoz del gobierno francés, Gabriel Attal explicaba que:
«La situación es tensa, muy preocupante en la Región parisina donde se multiplican las evacuaciones médicas porque cada cama cuenta».
Los pacientes del COVID-19 de la región del norte Altos de Francia están siendo trasladados a Bélgica al haber llegado los hospitales a su punto de saturación.
La agencia regional de salud confirma que están habilitando camas de cuidados intensivos en varios hospitales belgas para ayudar a los franceses a hacer frente a la saturación de las instalaciones.
Mientras tanto, el Primer Ministro Jean Castex dijo el sábado que la situación de la COVID-19 en la región de París era extremadamente tensa. Castex dijo que la vacunación en todas las regiones se iba a intensificar durante el fin de semana. El gobierno francés no ha anunciado nuevas medidas de contención y ha optado hasta ahora por el toque de queda a las seis de la tarde y no por el confinamiento total.
La presencia policial aumento en las calles de París el sábado para evitar aglomeraciones, reclamar el uso de la mascarilla y hacer cumplir el toque de queda.
En el centro de la capital francesa hubo colas en masa ante los comercios y los restaurantes de comida rapida.
Las autoridades parisinas intentan frenr los contagios cuando la ocupación de UCI supera el 95 % como enlos peores momentos del pico de la segunda ola del otoño pasado.
