Por encargo de la Municipalidad de Paraná, la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER) realizó un relevamiento, análisis y propuesta para mejorar el transporte público del área metropolitana.
El diagnóstico tomó un amplio arco de variables con eje en el funcionamiento de los colectivos donde se observó una tendencia a la baja en la demanda a la par que el servicio cae en prestación. El reporte concluye en la necesidad de mejorar la comunicación, atender las demandas de los vecinos y “redoblar el esfuerzo por romper la unitarización de la movilidad” para “encauzar las políticas de Movilidad Sostenible”, señala el documento al que accedió ERA Verde.
Es prioritario generar “un cambio cultural, en donde se priorice el bien común por sobre el interés individual” afirma entre sus recomendaciones el “Estudio de Diagnóstico y Propuestas de Mejoras para el Sistema de Transporte Público de la Ciudad De Paraná” efectuado por Ingeniería de la UNER. El documento elaborado a pedido de la Municipalidad de Paraná, sostiene que esta senda debe llevarse a cabo a partir de este convencimiento.
El trabajo fue presentado oficialmente el 4 de junio a la comunidad académica y a la comuna. La idea se desarrolló a partir de un convenio entre la Municipalidad de Paraná y la Facultad de Ingeniería que firmaron en diciembre de 2020. El objetivo perseguido fue “un estudio de diagnóstico y propuestas de acción primarias para el sistema de Transporte Público por Colectivos Urbanos de la Ciudad de Paraná y Área Metropolitana”, y en este sentido se analizaron distintos parámetros, entre los que se incorporaron estudios previos, estructura normativa y un relevamiento de las prestaciones del servicio de colectivos.
Entre las distintas variables, se destaca la pronunciada caída en la demanda del transporte de ómnibus el año pasado respecto de año 2019, del orden de -10,4% con una tendencia que se “se mantiene o incluso se agrava a partir del segundo semestre donde comienzan los conflictos entre empresas y choferes en el mes de agosto de dicho año, lo que provoca una importante caída de la demanda entre el primer y segundo semestre del 20%. Dicha caída en el segundo semestre es acompañada también por un fuerte decrecimiento en la producción de kilómetros recorridos de un 20% promedio (sin tener en cuenta el mes de agosto), estabilizándose en el entorno a los 865.000 km mensuales. Dicho año se cierra con 22.863.570 pasajeros transportados (-17% interanual) y 9.922.687 de kilómetros recorridos (-18% interanual)”.
En cuanto a la “oferta” para el uso de este medio, el informe observa que “las debilidades más importantes de la red”, están “vinculadas estrechamente a la pérdida de competitividad ante otros modos de transporte como ser: Bajas densidades de buses en la red lo que genera frecuencias laxas; Excesivas desviaciones y recorridos intrincados que aumentan notablemente los tiempos de viajes de los usuarios hacia los polos atractores de viajes; Corredores primarios de transporte sin líneas troncales”. Justamente para esto el informe presenta un diseño para la mejora de ramales y líneas.
Alternativas sustentables
Frente a estos hallazgos, el informe recomienda “que para la toma de decisiones a largo plazo se plantee un estudio de demanda mediante encuestas domiciliarias que permita establecer en forma inequívoca las reales demandas de movilidad de la población y establecer las políticas rectoras de movilidad general no solo para el transporte por colectivos”. Este consejo plantea justamente porque “se desconocen los deseos reales de movilidad que permiten optimizar las redes de TPP, establecer las políticas de desaliento del vehículo particular (moto o automóvil) y promocionar los modos no motorizados”.
Como otra opción de los colectivos, desde la Facultad de Ingeniería se propone articular el transporte ferroviario con el de colectivos. Para atender las autoridades y jurisdicciones, plantean abrir una mesa de coordinación con los municipios del área metropolitana, la provincia de Entre Ríos y Gobierno Nacional.
Luego de un exhaustivo análisis en el cual se tiene en cuanta la complejidad de esta red, el mercado, la explotación, la gestión y la gobernanza, el diagnóstico técnico señala que se pueden arribar a ciertas conclusiones para las diferentes propuestas y recomendaciones. Y en cuanto a la reflexión en un contexto de crisis sanitaria, se afirma que “es importante pensar el después de la pandemia donde el pilar más importante de la movilidad sostenible en las ciudades es el transporte público. Es por lo que llegado el momento será necesario redoblar el esfuerzo por romper la unitarización de la movilidad, que se profundizó en función de la pandemia, para volver a encauzar las políticas de Movilidad Sostenible, que en general deben llevarse a cabo a partir del convencimiento que se trata de un cambio cultural, en donde se priorice el bien común por sobre el interés individual. Todo ello debe pensarse y ejecutarse también con el necesario equilibrio social mediante comunicación inteligente, participación ciudadana e incentivos que eviten adaptar bruscamente a la población, sino que debe ser en el marco de un cambio cultural con un rumbo fijado hacia la sostenibilidad”, sostiene finalmente como recomendación el trabajo elaborado por docentes y alumnos de la carrera de Ingeniería en Transporte de la UNER.
FUENTE: Era Verde