Está acusado de participar en maniobras vinculadas a transferencias financieras internacionales realizadas a sabiendas del origen ilícito de los fondos.
El juez federal de Dolores Alejo Ramos Padilla amplió el procesamiento con prisión preventiva al detenido Marcelo D’Alessio. El falso abogado está acusado de participar en maniobras vinculadas a transferencias financieras internacionales realizadas a sabiendas del origen ilícito de los fondos.
El magistrado procesó con prisión preventiva a Pablo Bloise con un embargo de $ 10 millones al tiempo que amplió el procesamiento al comisario retirado de la policía bonaerense, Ricardo Bogoliuk. Vale recordar que además de supuestas extorsiones y espionaje ilegal, el juez de Dolores investiga maniobras vinculadas a operaciones de lavado de dinero.
En ese contexto, Ramos Padilla acusó a los tres detenidos de integrar una asociación ilícita dedicada «a efectuar de forma habitual, organizada, con división de roles específicos y de manera estable en el tiempo, transferencias financieras internacionales a sabiendas del origen ilícito de los fondos y con la finalidad de simular dicho origen ilícito, dar apariencia de licitud a los mismos y ponerlos en circulación en el mercado».
D’Alessio y Bogoliuk ya estaban procesados con prisión preventiva en la parte del caso que investiga una asociación ilícita que habría cometido varios hechos de extorsión en base a espionaje ilegal en causas judiciales.
Ahora, el juez sumó esta acusación basada en evidencia que da cuenta de que además estos tres acusados se dedicaban a manejar dinero de origen ilegal a cambio de comisiones.
Bloise es un licenciado en sistemas y quedó preso en esta parte de la pesquisa que investiga transferencias financieras internacionales desde el 20 de marzo al 11 de diciembre de 2018 por millonarias sumas en dólares estadounidenses o euros «a cambio de una comisión porcentual por cada una de las operaciones concretadas».
Esta parte de la pesquisa se inició a raíz del análisis de intercambios de mensajes detectados en un teléfono secuestrado a D’Alessio que daban cuenta de supuestas transferencias bancarias hechas a Europa y África por unos cien millones de euros.
FUENTE: Ámbito.com