Con personal municipal, se retuvo un auto mal estacionado y se labraron multas a motocicletas que estaban fuera del domicilio.
Tras desalojar una fiesta clandestina con 150 personas en una vivienda de Paraná, la Policía intentó desbaratar otra pero la dueña de casa no les abrió la puerta a los uniformados.
Ocurrió alrededor de las 6:15 de la mañana de este domingo. La fuerza recibió un llamado a la División 911 por «música a elevado volumen en una vivienda ubicada en calle Río Negro».
Efectivos de la Comisaría Cuarta constataron que «efectivamente había música a elevado volumen y por los ruidos de voces en una escalera, se dedujo que era una fiesta clandestina».
«Es por ello que se solicitó que saliera la propietaria, pero ésta se negó, aduciendo que eran tres departamentos que estaban de fiesta, sin brindar los datos y cerrando la puerta, continuando con la música», informó la Policía a AHORA.
Ahora bien, afuera «había ocho motocicletas estacionadas en el frente del domicilio, por lo que se procedió a llamar a Tránsito Municipal», cuyo personal «una vez presente, labró el acta por estar mal estacionadas, como así también se retuvo un auto Honda Civic» por este mismo motivo, señalaron desde la fuerza.
«Cabe destacar que la cantidad de gente que había en el lugar no se puede confirmar ya que no salieron de la casa», concluyó la Policía.