El Centro Mariápolis El Salvador pasó a manos del Arzobispado después de haber estado en comodato en poder del Movimiento de los Focolares. Ahora, ese lugar será utilizado para trasladar allí el Hogar de Sacerdotes Buen Pastor.
El Centro Mariápolis El Salvador, ubicado en la zona del Brete, en calle Pedro Londero al 3400, de Paraná, pasó a manos del Arzobispado después de haber estado en comodato en poder del Movimiento de los Focolares, fundado en la década de 1950 por la italiana Chiara Lubich y hoy, con unos 2 millones de simpatizantes en 182 países, es quizá la institución de laicos más numerosa de la Iglesia católica.
A comienzos de este mes de abril los Focolares quedaron en el ojo del mundo católico cuando produjeron el primer “Informe sobre abusos a menores y adultos vulnerables». Allí, no sólo recopilan las denuncias que han recogido entre 2014 a 2022 contra sacerdotes y religiosos, sino también contra laicos. En este periodo han recibido 61 denuncias de supervivientes o de familiares de víctimas relativas a abusos sexuales a menores y personas vulnerables cometidos en el movimiento desde 1969 hasta 2022. De las 61 denuncias, 13 se referían a abusos a menores de 14 años; 29 a menores de entre 14 y 18 años; 17 eran abusos a adultos vulnerables; y 2 se referían a posesión de pornografía infantil. La mayoría de los abusos (39) se han cometido en Europa, 15 en América, 3 en Asia o Oceanía y 4 en África.
Respecto del Mariápolis de Paraná, el jueves 20 de abril se formalizó el proceso de entrega del por parte del Movimiento de los Focolares al Arzobispado. Ahora, ese lugar será utilizado para trasladar allí el Hogar de Sacerdotes Buen Pastor, que actualmente funciona en calle Italia.
Como Centro Mariápolis el proceso comenzó en 1988, cuando el entonces arzobispo de Paraná, Estanislao Esteban Karlos, le propuso al Movimiento de los Focolares tomar en mano la casa donde había funcionado el preseminario y que en ese momento estaba en desuso.
“La necesidad de reubicar la casa del hogar sacerdotal Buen Pastor fue vivida desde el Movimiento como una experiencia sinodal de discernimiento comunitario muy importante. Luego de dos o tres meses de discernimiento con un equipo llegaron a la decisión: sentían que debían hacer este acto de amor concreto entregando la casa al Arzobispado”, indicaron desde la curia.
En el acuerdo de traspaso del predio por parte de los Focolares al Arzobispado se acordó que se mantendrá la totalidad de los empleados del Centro Mariápolis.
Fuente: Entre Ríos Ahora
