Junto a sus hijos, Javier Schanzenbach, salvó a una mujer y sus dos pequeños de un incendio en Strobel. El hombre rompió las rejas con sus manos para entrar en la vivienda en llamas.
La semana pasada ocurrió un devastador incendio en la localidad de Strobel, en el departamento Diamante, que dejó una vivienda reducida a escombros. Pero gracias a la valentía de un vecino y sus hijos, no hubo víctimas fatales.
Javier Schanzenbach, es quien protagonizó el acto de coraje y recordó lo vivido en la madrugada del pasado 10 de junio: “Nos levantamos a las 2 de la mañana para ir a trabajar y de repente escuchamos un grito, pero pensamos que era una pelea”, comenzó relatando.
Su hijo menor fue el primero en alertarlo sobre que en realidad había “fuego en la casa del vecino”. De inmediato, Javier corrió al lugar y encontró al dueño de la casa ya fuera, desorientado y con un celular en la mano. Le gritó que cortara la luz, y él mismo bajó las térmicas para evitar una tragedia mayor.
Javier no podía ingresar por la puerta, “porque era todo fuego”. Fue entonces cuando escuchó los gritos de una mujer desde una ventana lateral y no dudó: arrancó las rejas con sus manos y derribó parte de la pared. “La cama ya estaba con fuego. Ella estaba sentada, a los gritos y en shock”, describió.
Logró sacar a la mujer y al hijo menor, de 7 años. Luego, junto a sus hijos, volvió a entrar para rescatar al mayor, que estaba atrapado entre muebles y llamas. “Lo tironeábamos y se nos escapaba de las manos por el fuego que venía dando vueltas”, explicó. Finalmente, lograron sacarlo segundos antes de que el fuego consumiera completamente el lugar.
El niño estaba inconsciente y fue reanimado
“Lo llevamos a la esquina y no respiraba. Le hice los primeros auxilios y logró reaccionar”, narró Javier sobre el más pequeño. Mientras él llevó al padre al hospital en su auto. “Tenía quemada la panza, las manos, estaban en calzoncillo y le dieron un short”. Luego la policía trasladó a la mujer y los dos niños.
Elonce también dialogó con Johann Eliezer, hijo mayor de Javier, quien participó del rescate. “Por lo menos los sacamos. Están todos a salvo”, dijo, visiblemente emocionado. Relató que al llegar la policía no se veía nada por el humo.
Un acto que evitó una tragedia
“Si no la hubiera podido salvar, me enloquecía”, confesó Javier sobre el rescate de la mujer y mostró las rejas arrancadas como testimonio del esfuerzo desesperado. “No sé cómo hice. Dios me dio la fuerza”, afirmó en declaraciones al sitio Haydos Sintres. Para agregar que los gritos de la mujer “eran desesperantes”.
Con humildad, el vecino afirmó que no se considera un héroe: “Si me toca hacerlo de nuevo, lo hago. Capaz que alguien también lo haría por mi familia. Tienen que estar agradecidos a Dios porque volvieron a nacer; si no hubiera estado yo hasta que salieron los otros vecinos, ya hubieran estado envuelto en llamas”, cerró.
Fuente: Con información de Elonce.com