Simba fue rescatada durante un allanamiento por narcomenudeo. A un año y medio, esta cachorra mestiza se sumó a la División Toxicología y hoy es parte del equipo de perros detectores de narcóticos. Su historia demuestra la importancia del entrenamiento y cuidado en su nuevo rol.
En las instalaciones de la Escuela de Agentes, dependiente de la Dirección Institutos Policiales, se realizó la ceremonia de finalización del curso para guías y perros detectores de narcóticos – nivel inicial.
El curso estuvo dirigido a 21 funcionarios policiales de la Dirección de Toxicología y la Dirección de Prevención y Seguridad Vial, junto con personal del Servicio Penitenciario Provincial, quienes asistieron con sus respectivos cachorros.
Las actividades del curso se centraron en la preparación de estos perros para su labor cotidiana, utilizando juegos y diversos escenarios para que se familiaricen con su tarea diaria.
Entre las mascotas que completaron el curso, se encuentran Mali y Simba, perritas de la División Toxicología Concordia.
El caso de Simba destaca por ser muy particular. Esta cachorra mestiza, de apenas un año y medio, llegó a la División en junio de 2023, luego de ser rescatada durante una serie de allanamientos por narcomenudeo en el barrio Ex Aeroclub, publicó Concordia Policiales.
En ese operativo, Simba, que en ese momento tenía solo un mes y medio de edad, seguía y jugaba con uno de los oficiales mientras se desarrollaba el procedimiento. El oficial, conmovido por la situación, pidió a sus dueños que le permitieran llevar a la cachorra con él, a lo que la familia accedió bajo la condición de que continuaran brindándole los cuidados que recibía, como una alimentación de calidad y atención veterinaria.
Desde entonces, Simba se convirtió en parte fundamental del equipo, demostrando sus habilidades como can detectora de narcóticos.