A través de una investigación interna, la Cooperativa Eléctrica de Concordia detectó más de 100 medidores adulterados en socios que son grandes consumidores de energía: empresarios, comerciantes y dueños de aserraderos.
A través de una investigación interna, la Cooperativa Eléctrica de Concordia detectó más de 100 medidores adulterados. Se trata de decenas de medidores fraudulentos, en socios que son grandes consumidores de energía de Concordia. Según se mencionó hay reconocidos empresarios, comerciantes y dueños de aserraderos.
Lo que se informó es que el robo millonario de electricidad tendría cómplices internos; entre ellos, empleados del departamento específico para cumplir la función de evitar este tipo de maniobras. Además habría implicados contratistas y hasta, por lo menos, un efectivo policial.
El presidente de la Cooperativa Eléctrica, Marcelo Spinelli, contó que hay un sumario administrativo en curso; que podría derivar en sanciones, multas e incluso acciones penales.
Fraude
En la investigación, el departamento “Laboratorio” de la distribuidora descubrió más de un centenar de medidores adulterados que habrían sido instalados a solicitud del departamento “Hurtos y Fraudes” para reemplazar medidores de socios; todos ellos grandes consumidores de energía.
Los artefactos son catalogados como «sospechosos” de irregularidades o anomalías. La maniobra habría sido descubierta cuando uno de los empleados del departamento “Hurtos y Fraudes” estuvo ausente y fue reemplazado por otro del departamento “Laboratorio”.
Este último, en una inspección de rutina, habría encontrado un medidor con fraude que había sido instalado en una cafetería que pertenece a una importante firma comercial dedicada al rubro de panificados.
Irregularidades
Según publicó Diario Junio, el minucioso seguimiento -impulsado desde la propia Cooperativa- detectó que más de una centena de medidores estaban con fraude, logrados con una precisión profesional difícil de detectar si no se realiza la inspección por parte de un ojo experto y contando con el instrumental adecuado.
Los medidores adulterados habían sido todos instalados a grandes consumidores de electricidad: importantes comercios y emprendimientos que demandan mucha energía. Tal es el caso de un aserradero, cuyo propietario habría estado pagando una cuantiosa «cuota mensual» a cambio de ahorrarse una suma mayor en la factura de luz.
Al parecer, desde ese mismo aserradero habrían salido los testimonios que darían cuenta de cómo funcionaba la estafa a la Cooperativa y, por ende, a todos sus socios.
¿Empleados infieles?
Spinelli confirmó que ante dicha situación fueron apartados de sus tareas los empleados sospechados; que fueron multados socios de la Cooperativa que participaban de esta estafa y – además – informó que hay en un sumario administrativo en curso que podría tener derivaciones incluso en el fuero penal.
Fuente: Diario Junio