El 29 de septiembre es el Día Mundial del Corazón. Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de mortalidad y discapacidad en la Argentina.
POR STEFANIA SIVORI (*)
Desde el año 2000, se estableció el 29 de septiembre como Día Mundial del Corazón. Esta fecha fue proclamada por la Federación Mundial del Corazón junto al apoyo de la UNESCO y la Organización Mundial de la Salud (OMS). Según el Ministerio de Salud de la Nación las enfermedades cardiovasculares, son la primera causa de mortalidad y discapacidad en nuestro país. Responsables de más del 30% del número de muertes.
Estas enfermedades tienen asociados 4 factores de riesgo a destacar: malos hábitos alimentarios, sedentarismo, consumo excesivo de alcohol y tabaquismo. El consumo de grasas saturadas, grasas trans, alto aporte de sodio y azúcares inciden negativamente en nuestra salud. Pero entonces, ¿qué podemos hacer para alimentar saludablemente nuestro corazón?
En primer lugar, se recomienda entonces aumentar el consumo de frutas y verduras, asegurándose de consumir al menos 5 porciones de este grupo de alimento. Colaboran con la regulación de la presión arterial y también contribuyen a disminuir los valores de azúcar y lípidos en sangre. Además, otorgan volumen y variedad a la alimentación. Por otro lado, es muy importante, además, disminuir al máximo la ingesta de alimentos con altos contenidos de azúcares y sodio evitar agregarles sal a las preparaciones.
La segunda recomendación fundamental que podemos hacer como nutricionistas, es llevar a cabo una alimentación rica en omega-3. Estos ácidos grasos contribuyen a mantener el corazón sano. Además, mejoran el perfil lipídico, reducen triglicéridos y bajan ligeramente la presión arterial. Como el cuerpo no los produce por sí solo, debemos obtenerlos de los alimentos. Estos ácidos esenciales podemos encontrarlos en pescados grasos, en algunos vegetales, en las nueces y en alimentos fortificados. Sin embargo, el pescado no suele ser un alimento que se encuentre presente en la mesa de los argentinos.
Ante este complejo panorama nutricional y teniendo en cuenta que en Argentina uno de cada cuatro adultos es hipertenso y no lo sabe, desde hace tiempo desde Mastellone Hnos. venimos desarrollando productos que ayuden a cuidar nuestros corazones y atender esta compleja problemática.
La Serenísima es una marca que siempre priorizó la calidad de sus productos y dar respuesta a las necesidades y deseos de los consumidores. Hoy, ante un mercado que se enfrenta a nuevas tendencias de alimentación, asumimos el desafío de acompañarlos para ofrecer muchas más alternativas que tienen que ver con el consumidor actual, el que elije de acuerdo con su estilo de vida, su forma de ser y sus creencias
Desde Mastellone Hnos. trabajamos históricamente en el desarrollo de leches funcionales para cada necesidad, innovando en la categoría desde los años ’70. Así hoy en día contamos con una lecha fortificada en omega-3 que contribuye a mejorar la salud de sus consumidores y a cuidar nuestro corazón. Un vaso de esta leche aporta el 34% de los requerimientos diarios de Omega-3 (EPA y DHA). Es importante volver a recordar que la leche es un alimento versátil, ya que se puede consumir todos los días en el desayuno, en la merienda -sola, o con café, o con infusiones- así como también en preparaciones de cocina. Destacando que ninguna de sus propiedades se pierde al calentarse. Además de la leche cardio, Mastellone Hnos. ofrece una línea de quesos reducidos en grasa y sodio. Sin lugar a duda, estas recomendaciones nutricionales deben ir acompañas de actividad física y un estilo de vida saludable.
Para nosotros, el cuidado del corazón de nuestros colaboradores también es una preocupación que nos ocupa cada día. Es por ello por lo que nuestros colaboradores tienen la posibilidad de realizar consultas con profesionales de la nutrición, así como también con personal médico para realizar hacer un seguimiento de su estado de salud.
En este día donde buscamos concientizar sobre la importancia de cuidar nuestros corazones, queremos remarcar una vez más que la alimentación responsable es una herramienta fundamental que nos ayuda a reducir la probabilidad de prevenir enfermedades cardiovasculares.
(*) Nutricionista
FUENTE: Cronista
