Los prestadores de playas de la ciudad, están a la espera de que se aprueben los protocolos, en un marco de enorme incertidumbre sobre si llegarán turistas a la ciudad para disfrutar de las playas y cuál será su poder adquisitivo ante la crisis económica y la inflación que atraviesa el país.
La Mesa Empresaria de Turismo de Entre Ríos que es presidida por el ministro de Producción, Turismo y Desarrollo Económico, Juan José Bahillo, dejó en claro que el turista va a poder llegar, disfrutar y ser cuidado, para ello se trabajará fuertemente con cada intendente que determinará el grado de apertura de cada ciudad, con el Ministerio de Salud y con el COES.
En consecuencia, en los próximos días se estarán comunicando a las entidades los protocolos para playas, termas y piscinas que permitirá tanto a turistas como prestadores y trabajadores preparase para una esperada temporada estival segura.
Sin embargo, el sector es cauto y a menos de un mes no sabe si será factible poder abrir los complejos, al considerar los costos adicionales de poder poner en práctica los protocolos de bioseguridad, la cantidad de gente que se tendrá que tomar para mantener todo en funcionamiento y sin saber si habrá un ingreso masivo de turistas a la ciudad.
El principal cliente de nuestra industria turística son los sectores medios de Capital Federal y el AMBA, en la que si bien la circulación viral comenzó a bajar, pero el nivel de contagios sigue siendo alto.
Otra variable a tener en cuenta será el poder adquisitivo de la clase media ya endeudada, cuya situación económica tenderá a empeorar ante un contexto inflacionario y una economía paralizada por meses de cuarentena. Este contexto exigirá tener promociones y precios competitivos para poder tener alguna posibilidad de atraer visitantes.
Con 25 años en la actividad turística, Roberto Carro es el propietario del complejo turístico Punta Sur en el Camino de la Península.
Carro expresó que: “Todavía no tenemos un protocolo definido, es lo que estamos esperando para poder contratar al personal y comenzar a tomar reservas. La temporada comenzará el 4 de diciembre y tendríamos que tener todo listo para esta fecha. No estará faltando que desde la Asociación de Hoteleros y Gastronómicos de la ciudad nos llamen para decirnos que desde Nación se aprobó el protocolo para poder trabajar”.
Remarcó que: “Mi playa no es pública, sino que está destinada para los turistas que se hospedan en los bungalows que están dentro del complejo. Es una playa de 60 metros lineales y ahora que hay que mantener la distancia no podré dejar ingresar a nadie, más allá de la gente que se hospede aquí”.
Carro cuenta con 50 plazas hoteleras en el camping, “pero decidí achicar la cantidad, el bungalow que tenía capacidad para cinco personas, la dejamos en tres y las de cuatro a dos o tres personas, para que tengan más espacio es decir que al tener menos capacidad se nos va a complicar en cuanto a la recaudación”.
Fue optimista pese al contexto y consideró que: “Creo que vamos a tener temporada pero será para subsistir, porque tenemos que preguntarnos si los turistas van a venir a quedarse y dormir en un colchón, en el que estuvo durmiendo otra persona. La otra cuestión que me preocupa es el poder adquisitivo de la gente, si va a poder cubrir los costos de vacacionar en un momento en que todos los precios suben”.
En cuanto a su plan de bioseguridad, Carro le pedirá a los turistas que traigan su ropa de cama, las toallas, “les vamos a entregar las almohadas y la llave de la habitación en bolsas cerradas al estar sanitizadas con alcohol y tuvimos que cambiar el horario de entrada y salida del complejo para poder tener más tiempo con el fin de hacer una limpieza a fondo. También se le tomará la temperatura al ingreso y cuando el turista se vaya del complejo”.
Este verano, las playas no estarán atestadas de gente, habrá que respetar el distanciamiento social y los protocolos de bioseguridad para poder funcionar. ad para poder funcionar.
La playa del Tiro Federal
El presidente del Club, Celso Bereciartu, explicó que: “La decisión de abrir no la manejamos nosotros, dependemos de la decisión del Estado nacional. Estamos en una incertidumbre total y enojo de los socios, pero no podemos hacer nada, si nos salimos de las normas corremos el peligro que nos clausuren el Club, todavía no se puede estar en la playa ni en la pileta, los sanitarios tienen que tener una persona que lo estén limpiando permanentemente, son muy estrictos los protocolos y por ahora no sabemos cómo actuar.
Por ahora cuando llegue el protocolo solo pensamos abrir la playa para socios, luego veremos cómo se comporta la circulación viral en la ciudad durante el verano y tomaremos la decisión de abrir para otras personas. No nos podemos dar el lujo de habilitar el camping para 50 carpas y tener que montar una estructura para tan poco, lo que nos haría perder dinero y no podemos seguir perdiendo dinero, fue un año muy difícil. Por solo estamos trabajando para que los socios tenga un lugar de recreación”.
Solar del Este
Lisandro Moreyra uno de los responsables del complejo expresó su intención de abrir la playa: “No sabemos bien en qué condiciones, con qué capacidad y con qué público vamos a trabajar, no sabemos si nos van a dejar habilitar la playa y el camping. El problema que tenemos es que nos está quedando poco tiempo para acondicionar el lugar”.
Lisandro, dijo que por el momento no están teniendo llamados por reservas, cosa que el año pasado a esta altura del año sucedía.
“Nosotros tenemos la expectativa de abrir, pero no sabemos qué es lo que va a suceder. Fue un año complicado para el sector y será una temporada con mucha incertidumbre”, en tanto consideró que: “No vamos a poder aumentar los precios de los servicios, prácticamente vamos a tener que mantener los precios de los servicios del año pasado”, concretó.
Ñandubaysal
El único balneario que tiene la ciudad sobre la costa del río Uruguay también está en la nebulosa total. Oscar Bou el encargado del balneario manifestó que: “No podemos hacer nada hasta que nos entreguen el protocolo, de todos modos comenzamos con las gestiones de habilitaciones de la playa, después no podemos hacer nada más hasta que esté el protocolo”.
Mientras tanto ante la consulta sobre si se puede ingresar al camping como una forma de distracción y poder disfrutar de la naturaleza del lugar, Bou dijo que: “Por ahora no, el lugar no está habilitado para eso”.
FUENTE: El Argentino (Gualeguaychú)
