Así lo señaló esta mañana el ministro de Defensa de la Nación luego de que la diputada Amalia Granata propusiera el regreso de la obligatoriedad en el país. “La profesión militar tiene que ser elegida voluntariamente”, indicó Jorge Taiana.
En el inicio de esta semana, la diputada Amalia Granata propuso el regreso del Servicio Militar Obligatorio y reavivó el debate alrededor de una ley que llegó a su final luego del asesinato del soldado Omar Carrasco en marzo de 1994. “Es un despropósito este debate”, señaló el propio Jorge Taiana esta mañana. “Creo que es un sistema fuera de moda”, enfatizó el ministro de Defensa de la Nación.
La diputada provincial en Santa Fe se había mostrado a favor de volver a instaurar el Servicio Militar Obligatorio en el país tras el avance de la delincuencia, el desempleo y la pobreza en la que viven los jóvenes. En este sentido, Taiana fue consultado en radio La 990 y señaló: “Es un despropósito este debate por el Servicio Militar Obligatorio”, señaló.
“El servicio militar tuvo casi cien años de vigencia en la Argentina y tuvo en todo el mundo un propósito distinto. Se tomaba a los jóvenes, que forzados y obligados, iban a cumplir el servicio”, analizó el funcionario. Luego, agregó: “En Argentina tuvo incluso un sentido de nacionalización de los extranjeros, en un país con mucha inmigración. Pero el Servicio, la colimba, ya sabemos cómo terminó: terminó con la Ley Carrasco. Creo que es un sistema fuera de moda”, insistió.
“La profesión militar, la profesión del soldado, tiene que ser elegida voluntariamente y tiene que ser para hombres y mujeres que se preparen. Cada vez tenemos más mujeres en las Fuerzas Armadas”, comentó Taiana.
Luego, en este sentido, agregó: “Nosotros tenemos una política, una propuesta, de ampliar los cupos y las personas voluntarias que se incorporan como lo que se llama efectivamente soldados o voluntarios. Eso no tiene nada que ver con el servicio militar, es un concepto completamente distinto”. Taiana comentó entonces que apuntan a “acceder a un trabajo por medio de una formación profesional, que pueda seguir en las Fuerzas Armadas o que pueda tener un oficio para poder desarrollarse en el sector privado”.
“Ese es un concepto totalmente distinto al de la colimba, al del soldado que se lo tiene ahí de manera obligatoria. Son dos cuestiones muy distintas y no hay que confundirlas”, enfatizó en su análisis.
La iniciativa de Granata había surgido a raíz de un viaje que realizó a Israel, donde la “colimba” es obligatoria tanto para hombres como para mujeres. “Encaminaría la conducta de los jóvenes en el país”, remarcó Granata al ser entrevistada por el canal LN+, quien tomó como ejemplo la excelencia educativa de ese país.
“Me encantó el servicio militar obligatorio. Me parece fabuloso”, insistió la diputada poniéndole el pecho a la polémica que podrían generar sus declaraciones.
Para Granata, es necesario dejar el pensamiento de lo que fue el viejo Servicio Militar y abordar ese entrenamiento desde una perspectiva positiva para la formación de los ciudadanos.
“Es necesario pensarlo como la formación de una conducta para que los jóvenes se levanten a las 6 de la mañana, estudien, hagan ejercicios y les enseñen un oficio. Ahora tenemos cada vez más pobreza y chicos en la calle. Primero hay que generar una conducta. Con eso podes encaminarlo hacia esa conducta y darles otro estilo de vida”, insistió.
En marzo de 1994 —en el marco del Servicio Militar Obligatorio—, un conscripto que llevaba apenas tres días en el Grupo de Artillería 161 de Zapala fue asesinado a golpes por un oficial y dos soldados. Se intentó ocultar el crimen declarando a Omar Carrasco como “desertor”, pero su cuerpo apareció días después dentro del cuartel. El caso marcó el final de la obligatoriedad.
FUENTE: Infobae