La violencia y la intimidación no deben ser formas de expresar las disidencias en un estado democrático. El consenso, la tolerancia y la institucionalidad serán siempre el camino correcto, que avalamos, insistimos y promocionamos como vehículo valedero de consolidación democrática.
Son precisamente las instituciones y las leyes los fundamentos y cimientos de una sociedad civilizada cuyos diferendos se solucionan pacíficamente.
Allí es donde debemos vivir, allí es donde debemos disentir y de esa forma, crear la mejor sociedad para todas y todos.
Como diputadas y diputados de esta provincia y la representación que nos cabe como dirigencia política, bregamos por una sociedad en la que se pueda convivir en tranquilidad y con respeto por las y los demás.