El secretario general del sindicato de empleados de Vialidad Nacional en Entre Ríos se mostró conmovido por la decisión del gobierno nacional. Habló de privatización de las rutas.
Raúl Meza, secretario general del sindicato de empleados de Vialidad Nacional en Entre Ríos, expresó su profunda indignación y preocupación ante las recientes declaraciones del vocero presidencial, Manuel Adorni, y la inminente reestructuración del organismo.
En diálogo con Canal 9 Litoral, Meza calificó las medidas como “realmente aberrantes” y rechazó enérgicamente las acusaciones de corrupción dirigidas a los trabajadores. Además aseguró que “los trabajadores siempre somos el ajuste para este gobierno”.
Meza explicó que, si bien la noticia de un ajuste con una caída del 30% del personal y una reestructuración del organismo ya había sido anticipada en febrero, las palabras del vocero presidencial contra los trabajadores son “horribles” y “ofensivas”.
“Nosotros somos empleados,” afirmó Meza, contrastando su rol con el de políticos o ministros, a quienes se les imputa corrupción. “No hay nada más fácil para un organismo que desfinanciarlo como estamos de desfinanciados, sin elemento, y así seguimos trabajando igual, y que una persona en el cargo de él diga que somos corruptos los trabajadores”, sentenció.
El Secretario General subrayó que Vialidad Nacional cuenta con 5.300 trabajadores en todo el país, y solo en la seccional de Entre Ríos hay entre 160 y 200 empleados que se encargan de 1.000 kilómetros de rutas por administración más 1.100 kilómetros adicionales de corredores importantes, incluyendo la Autovía 12 y 14 hasta Corrientes, dos cruces internacionales y el viaducto a Rosario. Este esfuerzo se ha mantenido a pesar de que el organismo está desfinanciado, con pagos de sueldo atrasados y sin paritarias desde hace más de un año. “Se jactan de basurear a los trabajadores”, lamentó Meza, añadiendo que el trabajador del estado es visto “como lo peor”.
La reestructuración propuesta convertiría a Vialidad Nacional en una agencia por debajo del Ministerio de Economía, lo que genera una incertidumbre significativa sobre los recursos que se les proporcionarán para llevar adelante sus tareas.
Una de las consecuencias más directas para los ciudadanos será la privatización y concesión de 9.120 kilómetros de rutas en todo el país, un proceso que ya ha iniciado. En esta red, “cada 100 kilómetros (el argentino) va a pagar 3 dólares” para cruzar las barreras, que serán inteligentes. Además, si no se tiene “telepase, te van a cobrar multa”, un sistema similar al de Buenos Aires. Esta red concesionada contará con 90 puestos de control.
Meza amplió la crítica más allá del gobierno actual, señalando también a los legisladores que “han dejado abandonado a un montón de trabajadores” al firmar para que los poderes ejecutivos “sean una realidad”. Además, destacó que la situación de Vialidad Nacional no es un caso aislado, ya que otros organismos estatales “importantísimos” como el INTI y el INTA también sufren recortes y son “expuestos como vagos, como ñoquis”, lo cual considera muy alejado de la realidad.
El sindicato continuará su “plan de lucha” tras el análisis legal por parte de sus abogados. La reducción del 30% del personal, que implicaría la salida de aproximadamente 1.590 trabajadores de los 5.300 a nivel nacional, es una de las mayores preocupaciones.