La pronunciada bajante del Paraná a la altura Victoria pone en riesgo el suministro de agua potable en la ciudad. En articulación, la Dirección de Hidráulica y Obras Sanitarias, Vialidad Provincial y el municipio trabajan en la zona de Laguna Grande para asegurar la confiabilidad del abastecimiento.
El ministro de Planeamiento, Infraestructura y Servicios (MPIS), Darío Schneider, visitó la ciudad junto al jefe administrador de la Dirección Provincial de Vialidad (DPV), Exequiel Donda, y la presidenta municipal Isa Castagnino, para coordinar acciones de avances del equipo técnico y destacó la importancia de esta intervención. «Estamos atendiendo una problemática urgente que nos preocupa, como es la bajante del río Paraná y que podría afectar a los vecinos de Victoria en el suministro de agua, como lo está haciendo con la economía local y la pesca».
Por su parte, el director responsable de los trabajos, Oscar Pintos, informó que el nivel del río ha descendido y sigue en baja. Ante este escenario, se implementaron acciones inmediatas, como el cierre de un canal que derivaba agua desde Laguna Grande, impidiendo que llegara al riacho Victoria, donde se encuentra la planta potabilizadora.
Al respecto, el funcionario explicó que: «Estas acciones mejorarán el flujo de agua hacia el riacho, permitiendo una mayor captación por parte de la planta de agua potable. Finalizados los trabajos, se evalúa el impacto de la intervención y, de ser necesario, se procederá a la canalización de otro sector de Laguna Grande para optimizar el caudal hacia el riacho».
Entre las acciones que se llevan adelante, desde Vialidad se desplegó maquinaria para intervenir en la zona, con el objetivo de reducir el curso de agua. Esta medida forma parte de una estrategia logística y paliativa diseñada por los ingenieros para hacer frente a la situación de manera eficiente y planificada.
Además, se realizan gestiones ante la Dirección Nacional de Vialidad (DNV), por ser de su jurisdicción, para la profundización del canal de servicio entre los arroyos Carbón Grande y el Carbón Chico para mejorar y hacer confiable la captación en la toma de agua de la ciudad y garantizar un suministro adecuado para la población.