Un informe del Centro de Estudios de Desarrollo Económico (Cedma) advierte sobre los números de la industria de la construcción de la provincia. El informe fue elaborado por el extitular de la cartera de la Producción entrerriana, Álvaro Gabás.
Es de Perogrullo que la actividad económica se encuentra en un sendero de depresión económica. Todos los sectores productivos registran pérdidas, por ventas, o por competitividad, o por producción. La recesión económica es el factor común. El efecto de las políticas macroeconómicas difiere según la rama de actividad que pertenezcan. En el caso de la industria de la construcción el daño en su actividad es muy agudo.
Que el consumo agregado (es decir, toda la economía nacional) cayó un 10,3% en el mes de marzo/24 respecto del mismo mes del anterior. Pero en Entre Ríos, en el mismo período, el consumo cayó un 23,4%. En el caso de la Industria Metalúrgica, registró una caída del 18,1% y el promedio de toda la actividad industrial, es de pérdida en la producción del 21% (Datos de Indec). Para el caso de la Construcción, la paralización de la obra pública en comunión con la crisis económica llevó al sector a una caída del 40,2% de manera interanual.
El sector tiene aún descensos más pronunciados, en el caso de la producción de asfalto, arrojó una caída del 69,2% en marzo/24 respecto del mismo período del año anterior. La producción de hierro cayó un 54,3%, la de ladrillos huecos un 43,7% y la de Portland cayó un 43,1%.
El problema se sensibiliza, cuando se agregan los indicadores laborales. Según el IERIC, desde el mes de noviembre/23 a febrero/24 (último dato publicado), en el país hubo 62.029 puestos menos de trabajo. Es dable aclarar que no se consideran los trabajadores informales. Lo cual recrudece esta situación.
Para el caso de la provincia de Entre Ríos, la situación laboral evidencia la coyuntura que estamos atravesando. Desde noviembre/23 a febrero/24 la caída en los puestos de trabajo fue de 2.806 trabajadores. Este indicador, alcanzaría a 9.820 despidos, que resulta ser la estimación promedio nacional de pérdidas de puestos de trabajos formales e informales para nuestra provincia. Asimismo, el IERIC, publicó el salario promedio en Entre Ríos, en el cual se verificó un aumento nominal del 3% entre enero/24 a febrero/24, al pasar de $379.680 a $390.318. Va de suyo, que la inflación en dicho período arrojó un 20%. En rigor, la pérdida de salario real en Entre Ríos, registró un 17%, solo para ese mes.
El sector está atravesando un escenario muy delicado, la crisis económica sumada a la política nacional y provincial de paralizar las obras públicas, pone en amenaza a una industria de mano de obra intensiva, que fomenta el mercado interno, que procura el crecimiento regional y que coadyuva a la mejora de la calidad de vida. Frigerio, comunicó el comienzo de la obra pública. El sector lo mira con desconfianza, con pagos atrasados y judicializados, con pocas expectativas, sin una hoja de ruta o planificación en las obras públicas. Un gobernador que las circunstancias lo obligaron a declarar, pero que su gestión no acompaña dichos anuncios.