Augusto Motta, presidente de “Calisa”, expresó que la suba de retenciones a la avicultura, incluida en el proyecto “Ley Ómnibus” que el presidente Javier Milei envió al Congreso, “quita competitividad, atenta contra la industrialización y hasta deriva en un margen negativo, dado que se conjuga con un aumento de costos”.
El empresario explicó que “por un lado, se enfrentan a un mayor costo interno, porque pagarían más cara la materia prima principal, que es la alimentación de los pollos. Además, el otro problema es la pérdida de competitividad que te da el hecho de que te convenga exportar materia prima y no exportar con valor agregado. Ese es el golpe más fuerte en el caso de que las retenciones fueran aprobadas… Somos uno de los pocos países que pagamos derechos de exportación. Fue una puja siempre bajar algunos puntos hasta llevarlo a cero, que no se ha logrado. Es clave generar un sistema diferencial entre la retención de la materia prima y la retención para un producto con valor agregado que debería ser menor. Si no, parece que va en contra del proceso de industrialización” dijo en declaraciones a “Dos Florines”.
Motta además instó a que el Gobierno de Entre Ríos, se involucre para peticionar ante la administración nacional: “Tenemos el 50% de la producción avícola. Hay banderas que dejan de ser privadas y terminan siendo federales, porque hay fuentes de trabajo”. Puso en valor que el crecimiento de la avicultura estuvo apalancado por millonarias inversiones con una estrategia de agregado de valor y diversificación, pensada de cara al mercado interno y externo.