Tras las recientes elecciones generales, el futuro de la Cafesg estuvo en peligro de desaparecer debido a que son escasos los fondos excedentes para administrar. Este organismo, que alguna vez fue el motor impulsor de grandes obras en la región de Salto Grande, hoy se ve devaluado, limitado a pagar abultados sueldos a un reducido grupo de funcionarios políticos y mantener a empleados remanentes de épocas más prósperas.
La Cafesg, encargada de administrar los fondos excedentes de Salto Grande, ha experimentado una transformación significativa. En el pasado, fue protagonista en la ejecución de proyectos estratégicos para el desarrollo de la región. Sin embargo, en los últimos tiempos, se ha reducido a promover talleres diversos y la distribución de semillas para huertas familiares, así como a la realización de obras menores como alcantarillas y cordones de cuneta.
Tras las elecciones, surgieron rumores sobre la posible clausura de la Cafesg por parte del gobernador Frigerio, argumentando que la falta de excedentes no justificaba su continuidad. No obstante, la designación de Carlos Cecco de 81 años, abre el debate si es necesario que el estado entrerriano siga sosteniendo esta estructura.
Además, se especula que esta designación podría responder a favores políticos, y algunos críticos sostienen que la designación de Cecco al frente de la Cafesg, funcionaria más como una estrategia de justificación para que los dirigentes de Cambiemos en Chajarí asuman el control de otros cargos provinciales que corresponden al departamento Federación.
Por el momento, la designación de Cecco no parece ser una reivindicación histórica para Federación, sino más bien un capítulo más en la compleja trama política que rodea a la Cafesg y sus destinos.